No suspendas la medicación. Si te cuesta trabajo despertar temprano para darle la pastilla a tu hijo, deja en tu mesa de noche solo una pastilla sobre un plato con un vaso de agua. Programa tu alarma para despertar y darle la pastilla. Esto solo si te desvelaste. Si no fue así procura dársela antes de las 9.00 am y después de los alimentos.
Si tu hijo es adolescente le puedes ayudar de la misma forma, dejando solo una pastilla y el vaso de agua con la alarma para que se la tome él mismo. Esto les permite no perder la secuencia ni horario de la medicación y volver a dormir. Si dejas la pastilla en el plato es más fácil corroborar si se la tomó y no habrá dudas al respecto evitando la doble medicación (lo cual es riesgoso) o la ausencia de la misma porque no sabe si se la tomó.
¿Por qué antes de las 9.00 am. el medicamento?
Porque la mayoría de las veces el metilfenidato prescrito, es de acción prolongada y permanece en su organismo por alrededor de 12 horas. Recuerda que el medicamento lo mantiene en estado de alerta, más atento y más concentrado. Si le das a medio día la pastilla le será difícil conciliar el sueño y no descansará bien.
Busca actividades recreativas que le sean atractivas, en donde conviva con otros chicos y pueda descargar su energía.
Regula el tiempo de video juegos a no más de dos horas diarias. Recuerda que estos juegos son muy adictivos y al volver a clases será difícil despegarlo de ellos para que haga sus deberes. Equilibra con otras actividades como juego al aire libre, salir a pasear al perro, dibujo, armar rompecabezas, legos, juegos de mesa en familia, manualidades (para esto los abuelitos son buenos y es una oportunidad para convivir con ellos), etc.
Aprovecha los momentos para pasar en familia. Generalmente las rutinas de trabajo nos limitan para estar con los niños. El juego es un buen punto de unión, juega con ellos, platica, convive. No dejes que tu celular se interponga o que lo distraigas con la Tablet para que se entretenga y no tengas que prestarle atención.
Estar de vacaciones no quiere decir que se salga de la rutina en todo y tú no supervises. Recuerda que la estructura es necesaria en los niños con TDAH. Debe haber flexibilidad, pero hay cosas que debe seguir haciendo como dormir bien, lavarse los dientes, baño diario, seguir los hábitos cotidianos de casa como guardar sus juguetes después de jugar con ellos, etc.
